En nuestra vida pasamos momentos difíciles y pasamos por situaciones complicadas con personas que nos hacen daño, bien en un momento concreto o durante un tiempo continuado.
Eso nos marca y a la larga el dolor o el conflicto que vivimos, puede convertirse en resentimiento y amargura.
Si no somos conscientes, ese resentimiento y esa amargura van ocupando espacio en nuestro corazón. Un espacio que podría estar ocupado por el amor, la alegría, la paz...
Incluso puede que sintamos ira, enfado o culpa hacia nosotras mismas.
En cualquier caso, necesitamos perdonar. El odio o el rencor, no afecta a nadie más que a nosotras mismas. Nos va minando por dentro a nivel emocional, pero también a nivel mental y físico.
Te propongo empezar a liberarte de esa carga que te impide ser libre y que resulta un freno para tu crecimiento personal.
He preparado una meditación que podrás realizar siempre que sientas que necesitas perdonar, soltar….
SI tienes aceites esenciales en casa, puedes utilizar alguno de estos aceites: el ae de incienso (nos ayuda a cicatrizar las heridas físicas y del alma), el ae de lavanda que nos reconforta y nos calma, el ae de ciprés que nos ayuda en procesos de duelo…
También puede ayudarte tener entre tus manos o cerca de ti un cuarzo rosa. Es el cristal del amor incondicional. Nos ayuda a perdonar y es de gran ayuda en los procesos de duelo..Ahora sólo queda que escuches la meditación y te permitas soltar esas ataduras que no te permiten ser libre. Poco a poco el dolor, el rencor, la rabia…. dejarán espacio que podrás llenar de amor, de luz y de paz.