Hablamos de reiki con los niños

Reiki es una terapia energética...

que no tiene contraindicaciones. Podemos utilizarla en cualquier situación, en caso de cualquier dolencia, junto con cualquier otra terapia o tratamiento y en cualquier edad. 

También en caso de mujeres embarazadas o bebés (incluso prematuros o recién nacidos) y niños.

Ahora te estarás preguntando:  ¿cómo puedo hablar de reiki a un niño? ¿Va a entender qué es la energía o cómo se produce el proceso de sanación?

Puedo decirte que es más complicado para el adulto que para el niño. Podemos darles Reiki desde que nacen (y antes, durante el embarazo) y decirles simplemente que es para estar tranquilo y sentirse mejor.   

Los niños son canales puros. Nacen conectados energéticamente. Para ellos es suficiente sentir que si les duele algo, les ponemos las manos y se sienten mejor. No necesitan el proceso racional que hacemos los adultos. Tienen una gran energía vital y necesitan menos tiempo de tratamiento porque se descompensan menos y se recuperan antes.

Dar Reiki a los niños les ayuda a estar más tranquilos,  dormir mejor, regular mejor sus emociones, aliviar dolores de dentición, caídas, dolores abdominales, regular el ritmo de sueño, mejorar la concentración...

Además podemos enseñarles a ponerse las manos y que lo hagan por sí mismos. A partir de los 5 o 6 años pueden recibir la iniciación y lo que es mejor, podemos compartir con ellos esos “momentos Reiki”. Estarán aprendiendo a ser autónomos, calmados, autorregularse y ayudar a los demás. 

Aquí te dejo una meditación que pueden hacer los niños/as para pararse a sentir la energía en sus manos (aunque no estén iniciados). Te invito a hacerla juntos. Será un momento muy especial.

Meditación de las manos (niños)